Si aún no lo ha probado, imagine lo que se siente estar cara a cara con un dragón que escupe fuego y que acaba de comer un barril de whisky lleno de canela picante. Vívelo, ámalo, dispara, lo que suceda después depende de ti.
Utiliza las flechas izquierda/derecha para navegar por la presentación o deslízate hacia la izquierda/derecha si usas un dispositivo móvil